La vuelta a la rutina en el trabajo, el fin de las vacaciones, un nuevo curso por delante, problemas de conciliación… son muchos los factores que afectan a nuestra situación laboral en estos meses del año. En España son más de 19 millones las personas ocupadas según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) del segundo trimestre de 2018, de las cuales un gran número vuelve a sus labores en el mes de septiembre tras unas merecidas vacaciones. Es por ello, que en la segunda quincena del mes de septiembre quisimos hacer una estudio sobre el mercado de trabajo entre nuestros panelistas para conocer cómo era su situación laboral y obtener unas conclusiones sobre el grado de aceptación o descontento con su trabajo, intención de cambio, motivaciones…
Para conocer más conclusiones del estudio, sigue leyendo porque te detallamos los resultados del estudio de mercado online realizado a un muestra de 1.200 personas de toda España.
Uno de los aspectos de actualidad en relación al empleo es la propuesta del Gobierno para aumentar el salario mínimo interprofesional en 164 euros más, hasta alcanzar los 900 euros al mes. En nuestro estudio, previo al anuncio de esta medida, preguntábamos a los encuestados sobre su opinión acerca del salario mínimo, que se sitúa actualmente en los 735,9€. En este sentido, casi el 100% considera que se debería aumentar esa cantidad.
Otro punto de debate es la edad de jubilación. Aunque hoy en día la edad de jubilación está en los 65, hay gente continúa trabajando pasados los años, o gente que se ve obligada a dejarlo antes de tiempo. Las personas que han participado en este estudio lo tienen muy claro y es que el 49,9% ve la edad de jubilarse a los 65. Un porcentaje menor, 37,5%, cree que lo ideal sería poder jubilarse antes de llegar a esa edad, y un 12,6% cree que hay la necesidad de continuar trabajando y jubilarse con más de 65 años.
Según los resultados del estudio sobre el mercado de trabajo, la gran mayoría que vuelve a la rutina trabaja para terceros, exactamente, un 84%. El resto, el 16%, se divide en gente que trabaja independientemente para otros o son personas emprendedoras. Aunque el estudio revela que de momento son pocos los emprendedores, un 32,9% afirma que estaría dispuesto a montar su propia empresa y un 45,6% quisieran hacerlo, pero aseguran que sus circunstancias les impide llevarlo a cabo.
Si preguntamos sobre lo que más se valora de un trabajo, las personas encuestadas aseguran que es la estabilidad laboral que les ofrece su trabajo y el ambiente laboral que se respira en él. Después tienen muy en cuenta las facilidades que les da la empresa para conciliar, como las opciones de jornada intensiva o teletrabajo, flexibilidad horaria, etc. El salario y la cercanía del hogar son la cuarta y quinta opción más valorada. Tras estas opciones, se sitúa el prestigio de la empresa y la relación con los superiores. Por último, se destacan mínimamente la posibilidad de ascenso, las instalaciones y los cursos de formación que pueda ofertar su empresa.
Por otro lado, siempre se pueden mejorar las condiciones, y los encuestados lo tienen claro. No siempre las mejoras para el trabajador tienen un coste económico para la empresa, lo que se conoce como ‘salario emocional’ y que suponen acciones que repercuten en el bienestar del trabajador y su motivación para hacer carrera en la empresa. Entre las medidas planteadas se encuentran las siguientes:
En cuanto a las medidas con mayor carga económica para la empresa más valoradas por los trabajadores, ya sea a modo de incentivos o complementarias al salario, destacan como las 3 más valoradas la oferta de un seguro médico privado, un plan de pensiones y comedor de empresa o ticket de restaurante.
Entre los que dicen que sí quieren cambiar de trabajo, les hemos preguntado sobre el periodo de tiempo en el que tienen pensado hacerlo. En nuestro estudio sobre el mercado de trabajo están los que dicen que van a hacerlo el siguiente año, dos años después o cinco años después como se muestra en las siguientes gráficas.
Con la vuelta al trabajo en septiembre, los días de descanso y reflexión en vacaciones y la adaptación de nuevo a rutina y horarios, llegan en mayor medida los cambios de empleo. Eso nos hace preguntarnos si en verano la gente tiende a pensar más en ese cambio que en otra época del año. Los jóvenes lo tienen claro, y es que el 45,5% de las personas en edad comprendida entre 18 y 35 años confirma que sí piensan más en el cambio en la época de verano. No ocurre lo mismo con la población un poco más adulta, ya que entre 36 y 60 años un 35,5% piensa en el cambio en verano.
Pero ¿y sí el nuevo trabajo está a 2.000 km de casa? Es lo que está ocurriendo a muchos jóvenes con la situación actual de empleo en algunos sectores. Muchos de ellos tienen la obligación de emigrar a otros países para poder conseguir trabajo. Para algunas personas no hay ningún problema, pero para otras salir de la zona de confort supone un gran esfuerzo. Así lo demuestra los datos. Para el 32,6% de las personas encuestadas no supone un problema salir de su país e ir a cualquier parte del mundo por un empleo o mejora laboral, aunque también es un 29% los que dicen que no se mudaría a cualquier sitio por cambiar de trabajo. Por otro lado, están las personas que sí se movería si es por España, un 24,7%, y las personas que se moverían a una distancia menor a 150 km. de su hogar, que se sitúa en un 13,8%.
Entre todas ellas son los más jóvenes los más aventureros a salir de España por un empleo. Un 44,2% tiene claro que si se tiene un empleo fuera del país se va a ir, 11 puntos por encima de los mayores de 30 años, que no se deciden tan fácilmente a dar el paso.
Cambiar no significa empeorar, es más, conseguir un nuevo empleo en la mayoría de los casos lleva aparejado una mejora en las condiciones, salario… Los encuestados tienen claras sus prioridades a la hora de llevar a cabo el cambio y es que el 45,1% asegura que, para el cambio, tendría que tener un aumento del salario. La siguiente condición que valoran es las mejoras en la conciliación, ya que un 40,3% necesitaría eso para empezar en un nuevo trabajo. Por último, un 14,6% de los entrevistados en el estudio sobre el mercado de trabajo se aventuraría a emprender su propia empresa.
Aun así, cuesta mucho dar ese paso. Es por ello por lo que el 45,1% prefiere la estabilidad que le da el empleo actual y no quiere ningún cambio. También hay un 16,3% que se siente inseguro y con miedo al cambio y le cuesta dar el paso. Por otro lado, un 27,3% si está dispuesto y con ganas de aprender cosas nuevas y encontrar nuevas funciones. Por último, se encuentra un 15,7% que trata de mejorar las condiciones de salario y horario siempre que se pueda a la hora de cambiar de trabajo.
El 50,8% asegura que trabaja en lo que les gusta y un 6,3% se sitúa en el lado opuesto, y asegura que su trabajo «no le gusta». El 42,9% lo ve simplemente como un trabajo sin entrar en detalles sobre si les gusta o no. Por otro lado, el 67,3% de los encuestados ha respondido que su trabajo le hace feliz, frente al 32,8% que ha dicho que no es feliz en su trabajo. Pero para profundizar más en este punto, son los jóvenes de entre 18 y 35 años los que se sienten más felices, concretamente un 71,5% afirma este punto; un porcentaje que disminuye en las edades comprendidas entre 36 y 65 años, que baja al 65,1%. Cabe destacar que entre géneros no hay una diferencia significativa en el grado de felicidad que les proporciona su empleo, según se desprende de nuestro estudio sobre el mercado de trabajo.
Por el contrario, aunque parezca que su trabajo les hace feliz y creamos que no lo cambiarían por nada, cuando se les pregunta por si van a cambiar de empleo, los más jóvenes son los que más animados se ven a hacerlo, ya que solo un 28,5% de personas entre 18 y 35 años dicen que no quieren cambiar de trabajo. Al contrario que ocurre con personas de más edad, de entre 36 y 60 años, quienes más de la mitad, un 57,3% tiene claro que cambiar de trabajo no es una opción en sus vidas.
A todo el mundo le han preguntado en su vida qué quiere ser de mayor. Por suerte muchos lo consiguen y otros dejan de lado esos sueños de época de la niñez. El 21,6% ha conseguido llegar a trabajar en lo que siempre ha querido, pero la situación del 53,2% no es así. Aun así, hay gente que no abandona la ilusión y un 25,3% sigue intentando llegar a ese puesto de trabajo que tanto lo desea.
Soñar es gratis, y soñar con la profesión también. Hombres y mujeres encuestados tienen claro cuál es su profesión soñada, cada género con sus prioridades claras que se muestran a continuación:
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Fecha de actualización 14 abril, 2024
